
Abusó de la hija de su pareja durante tres años: fue condenado a 11 años de prisión
El hombre fue declarado culpable por delitos de abuso sexual agravado contra una niña de entre 11 y 13 años. El tribunal valoró los testimonios y la prueba forense.
Un hombre fue condenado a once años y seis meses de prisión efectiva por abusar sexualmente, de manera reiterada, de una niña con la que convivía en la ciudad de Bariloche. La sentencia fue dictada por un tribunal que resolvió por unanimidad tras analizar los testimonios, informes médicos y pericias forenses presentados durante el juicio oral. El condenado era pareja de la madre de la víctima y, según se acreditó, aprovechó esa condición para someterla en múltiples oportunidades entre los años 2019 y 2022, cuando la niña tenía entre 11 y 13 años de edad.
Durante el debate, el tribunal escuchó los testimonios de familiares de la víctima, profesionales del área forense y personal que intervino en la Cámara Gesell, donde la menor relató los episodios sufridos. También se incorporaron al expediente informes médicos y psicológicos que reforzaron la veracidad de sus dichos.
En base a esa evidencia, los jueces concluyeron que los hechos fueron debidamente acreditados por el Ministerio Público Fiscal y encuadraron la conducta del imputado en el artículo 119 del Código Penal de la Nación, que refiere al abuso sexual con acceso carnal agravado. La figura se agrava por el vínculo de convivencia con la víctima menor de 18 años, en línea con lo establecido en el inciso f del cuarto párrafo de ese artículo. También se aplicaron los artículos 45 y 55 por la pluralidad de hechos.
Los abusos ocurrieron en fechas que no pudieron determinarse con exactitud, pero fueron ubicados por la Justicia entre los años 2019 y 2022, en al menos dos domicilios distintos de la ciudad. La víctima era hija de la pareja del imputado, y el tribunal consideró probado que el hombre se aprovechó de la convivencia diaria para perpetrar los ataques sexuales, que se sucedían con frecuencia y bajo distintas circunstancias.
Durante la audiencia de cesura, en la que se determinó la pena, el tribunal valoró tanto los agravantes del caso como los atenuantes expuestos por la defensa, tras escuchar a los testigos presentados por ambas partes. El ahora condenado brindó una breve declaración final, en la que no mostró signos de arrepentimiento. Finalmente, los jueces resolvieron imponerle once años y seis meses de prisión, de cumplimiento efectivo.